Después de la grieta que generó la caída del Presupuesto nacional entre el oficialismo y la oposición, y el posterior ida y vuelta por las posibles “consecuencias” para las provincias, el presidente Alberto Fernández buscará cerrar el lunes un nuevo consenso fiscal con todos los distritos del país. Aseguran que este acuerdo busca darle más autonomía a los gobernadores y mayor estabilidad jurídica al sistema tributario argentino.
El mandatario Gustavo Valdés confirmó que formará parte del encuentro en Casa de Gobierno y rubricará el Consenso Fiscal, en una señal de acercamiento al Estado nacional con quien mantuvo a lo largo del año una tirante relación, con fuertes críticas a las políticas instrumentadas, muchas veces denunciando discriminación a Corrientes.
“Vamos a estar en Buenos Aires firmando el Consenso Fiscal, considerando que están dadas las condiciones para un nuevo pacto”, reveló Valdés.
Dio a conocer que “trabajamos mucho con el Gobierno nacional y equipos técnicos de Economía para armonizar las normas del Pacto Fiscal”.
En este mismo sentido, comentó que últimamente tomó contacto con el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, por este tema en particular. “Estuvimos conversando entre todos, también con los gobernadores de Juntos por el Cambio”, reveló.
Señaló además que Corrientes “cumplió acabadamente con el anterior (Consenso Fiscal) y vamos a estar haciéndolo también con este”. Se expresó también en un tono dialoguista al indicar que “hay que sentarse a conversar para tratar de resolver problemas, porque hoy tenemos que trabajar juntos para acompañar al Gobierno nacional a resolver algunos temas que son institucionales, con madurez política”.
Al respecto, insistió en que “el que gobierna es uno solo y tiene que convocar a todos los sectores. Nosotros estamos para acompañar las políticas que sean razonables, no se puede imponer algo a los garrotazos, empujones o aprietes”.
Impuesto a la herencia
El nuevo Consenso Fiscal que la Casa Rosada espera firmar con las provincias incluye un punto que sorprendió a muchos economistas. El borrador que les enviaron desde el Ministerio del Interior establece que las jurisdicciones “procurarán legislar un impuesto a todo aumento de riqueza obtenido a título gratuito como consecuencia de una transmisión o acto de esa naturaleza”.
Es decir, la Nación impulsa que se impongan cargas tributarias a herencias, legados, donaciones y anticipos de herencia.
De acuerdo con una publicación del diario La Nación, cinco responsables de Economía de diferentes jurisdicciones -oficialistas y de la oposición- y todos admitieron desconocer el porqué de ese punto, que es el séptimo del texto que recibieron. “No tiene ninguna razón, las provincias no tienen prohibido crear esa carga. La mayoría no la tienen y no se estaba analizando generarla”, afirmó un funcionario cuyano.
Lo llamativo es que el texto señala que tanto las provincias como la ciudad de Buenos Aires “procurarán” crear el impuesto.
El objetivo es que “comprenda a bienes situados en su territorio y/o beneficie a personas humanas o jurídicas domiciliadas en el mismo, busca aplicar alícuotas marginales crecientes a medida que aumenta el monto transmitido a fin de otorgar progresividad al tributo”.
Hasta el momento, Buenos Aires es la única provincia que cobra una carga de este tipo. En 2009 intentó instrumentarlo el entonces gobernador de Santa Fe, Hermes Binner, pero la Legislatura no se lo aprobó. En 2013, Entre Ríos lo impuso y el gobernador Gustavo Bordet lo derogó en 2019.
Por su parte, la secretaria de Provincias del Ministerio del Interior, Silvina Batakis, aclaró que “el proyecto no autoriza aumentos de tributos, pero sí le confiere mayor estabilidad jurídica a todos los sectores que deben pagar impuestos y, por otra parte, también le da mayor estabilidad jurídica y certeza a los gobiernos provinciales, porque el próximo año no necesitan un nuevo consenso para poder mandar sus leyes impositivas a cada una de las provincias”.
Fuente: ellitoral.com.ar Autor: portalcorrientes.com.ar